Dic 15, 2025

1916

Leche: Cabra
Tipo: Pasta blanda, corteza natural con una ligera capa de ceniza vegetal
Denominación de Origen: No
Materia grasa: No definido
Maduración: Entre 4 y 6 semanas
Aspereza: Suave
Vino: Taittinger Brut Réserve (AOC Champagne)
País de origen: Estados Unidos de América
Región: Vermont - Nueva York

El queso 1916 nace de una colaboración estrecha entre Vermont Creamery y Wegmans, basada en una afinidad profunda por la calidad, el origen de la materia prima y el respeto por el saber hacer artesanal. Vermont Creamery, especializada en quesos de cabra, buscaba explorar nuevas expresiones de su leche más allá del formato fresco, mientras que Wegmans llevaba años perfeccionando el afinado de quesos en sus propias cuevas. El nombre del queso hace honor al año de fundación de Wegmans, simbolizando la historia, la tradición de la empresa y la unión entre producción artesanal y afinado experto. De ese encuentro surge un proyecto conjunto concebido para aprovechar las fortalezas de cada socio y dar forma a un queso exclusivo, con identidad propia.
La elaboración comienza en Vermont, donde Vermont Creamery produce un queso fresco a partir de leche de cabra pasteurizada. Posteriormente, las piezas se envían a las cuevas de afinado de Wegmans en Rochester, Nueva York. Allí, cada queso se espolvorea a mano con ceniza vegetal formando el año 1916 y es madurado cuidadosamente por un equipo especializado hasta alcanzar el equilibrio deseado de textura, corteza y sabor.
Se presenta en pequeños cilindros individuales, con corteza fina y natural ligeramente cubierta de ceniza, que resalta visualmente el año. La pasta blanca marfil es inicialmente firme y quebradiza, evolucionando hacia una textura cremosa y fundente a medida que madura, generalmente durante 4 a 6 semanas.
En nariz ofrece aromas lácticos limpios, con notas de yogur, nata fresca y un sutil recuerdo a champiñón. En boca es equilibrado, con acidez fresca, matices cítricos y herbáceos, un toque mineral aportado por la ceniza y un final suave, largo y elegante.
Se disfruta mejor a temperatura ambiente, acompañado de frutas frescas o secas, nueces, miel o panes rústicos. En la cocina, se puede incluir en ensaladas, tablas de quesos o platos gratinados, aportando cremosidad y sofisticación. Para maridarlo, funciona muy bien con vinos blancos frescos, espumantes brut o cervezas suaves, que realzan su sabor sin opacarlo.

Mundoquesos

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