Rotondo
Este queso lo elabora la Latteria di Camolino, una quesería que está situada en el municipio de Sospirolo, a las puertas del Parque Nacional de los Dolomitas de Belluno, y en particular en la carretera que conduce al valle del Mis, una zona de gran atractivo turístico gracias a su lago, la cascada de la Soffia, los Cadini del Brenton (pozas naturales de agua) y numerosos senderos naturales.
Fundada en 1941, es una de las pequeñas queserías de la provincia de Belluno que recoge y transforma la mayor cantidad de leche, conservando los sabores y aromas tradicionales.
En 2013, se transformaron aproximadamente quince mil quinientos quintales de leche y actualmente el promedio diario es de cuarenta y cinco quintales.
El hecho de que las pocas explotaciones agrícolas que quedan en el territorio de Sospirolo estén gestionadas por jóvenes representa una garantía de continuidad para la quesería, pero también una forma de salvaguardar el territorio.
El Rotondo (o simplemente «piastra» (plancha)) es un queso muy regional y poco común, elaborado con leche pasteurizada y semidesnatada de vaca.
De pasta semiblanda y blanca, con corteza fina. En boca es dulce, con notas lácticas y de yogur. Tiene un tiempo de maduración de aproximadamente un mes.
Su forma es cilíndrica alargada, con una longitud de 40-45 cm, un diámetro de 8/10 cm y un peso promedio de aprox. 2,5-3,00 kg.
La lechería recoge la leche de siete ganaderos de la zona de Camolino, que producen un promedio de 4.300 litros de leche al día, de vacas de raza parda.
Es un queso que no está pensado para tomar solo, o como queso de mesa. Es perfecto para tostar o, mejor aún, cocinar en la plancha: después de cortarlo en lonchas finas de aproximadamente 1 cm, se coloca en la plancha, en la parrilla o en una sartén antiadherente caliente. Se cocina por ambos lados, sin añadir sal, porque ya está ahí, y se sirve. Una buena variación de esta receta es enharinar las lonchas con polenta amarilla antes de servirlas en la plancha para darles un sabor extra. Lo acompañaremos con un vino afrutado blanco, como un Pinot Grigio.