BuonaSorte
El BuonaSorte es un queso artesanal de carácter excepcional elaborado por la histórica quesería Luigi Guffanti, ubicada en Arona, provincia de Novara, Piamonte, Italia. Fundada en 1876, la familia Guffanti comenzó afinando Gorgonzola y transformó una antigua mina de plata en una quesería natural, aprovechando su temperatura y humedad constantes para lograr una maduración perfecta durante todo el año. Con el tiempo, los hijos de Luigi, Carlo y Mario, expandieron el negocio a la exportación, consolidando la tradición familiar a lo largo de cinco generaciones y extendiendo su experiencia a la elaboración del Parmigiano Reggiano y a otros quesos internacionales. Hoy, Carlo Guffanti Fiori y sus hijos Giovanni y Davide continúan liderando la marca con la misma pasión por la excelencia y el conocimiento integral del proceso de elaboración: desde los pastos y animales hasta la flora bacteriana que define la calidad del queso.
El BuonaSorte se presenta en varias versiones: una elaborada exclusivamente con leche de vaca y otra con mezcla de vaca y búfala, con distintos grados de maduración. La versión de vaca proviene de animales alimentados únicamente con los pastos locales, y la leche se recoge en los ordeños de la noche y la mañana siguiente, preservando toda su frescura y riqueza natural.
Su corteza natural, dura y compacta, varía del amarillo dorado al marrón claro según la maduración, mientras que su interior revela una pasta amarillo pajizo de textura granulosa, que se fractura en escamas finas. Su sabor es intenso y aromático, con personalidad marcada, notas de pasto y un carácter seco y persistente que refleja la calidad del terroir y la maestría del afinador.
Este queso se comercializa en ruedas grandes y cilíndricas, con caras planas, lados rectos o ligeramente convexos, un diámetro de 40–45 cm, altura de 18–22 cm y un peso de 32–38 kg por pieza. El nombre «BuonaSorte» hace referencia a la tradición quesera de denominar los lotes de queso “sorte” (suerte), indicando que algunos lotes podrían resultar mejores o peores por factores fortuitos; este queso representa aquellos lotes que alcanzan la excelencia.
Para disfrutar del BuonaSorte en todo su esplendor, es recomendable consumirlo a temperatura ambiente, cortado en lascas o escamas para apreciar su textura y aroma completos. Puede degustarse solo, acompañado de un vino tinto estructurado como Barolo o Rioja Reserva, o acompañado de mieles suaves, peras, frutos secos o pan rústico, que realzan sus matices salinos y dulces. También se destaca en la cocina: rallado o laminado sobre pastas frescas, risottos o verduras asadas, aporta profundidad y un toque umami, intensificando su aroma sin perder elegancia. Su larga maduración lo hace menos adecuado para fundir por completo, pero perfecto para servir en virutas sobre preparaciones calientes.