Toggenburger Ziege

El queso fue creado para promover la crianza de las cabras locales de Toggenburg.
Queso alpino muy singular por estar elaborado con leche de cabra. Se emplea leche termizada de cabras originales de Toggenburg, que adquiere sus propias características al pastar los animales en las colinas de esta región. El resultado es este maravilloso y aromático queso.
Quién no las conoce, las cabras Toggenburg de color marrón claro y blanco que tienen su origen en Obertoggenburg. Aquí es donde todavía hoy se sienten más cómodas. «Autóctona» simplemente, no hay nada de qué quejarse. Hay que cuidar a estas originales ingeniosas, inteligentes y resistentes cabras. La tradición y la artesanía también se practican en la producción de queso en la pequeña quesería especializada Güntensperger en Bodmen.
Los queseros calientan la leche fresca de cabra de Toggenburg en la tradicional cuba de cobre y enriquecen la leche con cultivos de cuajo y ácido láctico. Cuando la consistencia es perfecta, cortan la leche que se ha espesado con el arpa de queso y, como en los buenos tiempos, sacan los pequeños cubos de queso crema con la estopilla.
Los queseros de Güntensperger cuidan el queso de cabra a mano en la quesería durante unos cuatro meses.
Cuando nacen las crías, los cabritos necesitan la leche de la madre cabra, por lo que este queso no está disponible durante todo el año.
Distintivo y firme en la mordida, un fino y típico aroma a cabra en la nariz. Da una idea del carácter único y de su tierra natal. Los finos y crujientes cristales de sal (tirosina) se mezclan con el sabor aromáticamente fuerte y especiado de la pasta. La dulzura equilibrada le da al queso su aroma lleno de cuerpo.
El queso se presenta en forma de ruedas de un diámetro de unos 24 cm. un grosor de unos 9,5 cm y un peso de 3.5-4.5 kg. Es importante consumir el queso a temperatura ambiente, si quiere saborear toda su fragancia de matices. Una vez llevado a la temperatura adecuada, resulta delicioso en una tabla de quesos, servido con miel de flores silvestres, nueces, frutas como el melón, las uvas o manzanas. Cortado en dados en ensaladas, especialmente bueno cortado en lonchas para bocadillos. Combínelo con Cabernet Sauvignon, Gewürztraminer o Riesling.