Feb 14, 2024

Ové Japonais

Leche: Cabra
Tipo: Pasta blanda, corteza florecida decorada con una hoja de cerezo japonés
Denominación de Origen: No
Materia grasa: 45%
Maduración: De 2 a 3 semanas
Aspereza: Suave
Vino: Barzen Eiswein (D.O. Mosel)
País de origen: Francia
Región: Orne (Normandía)

El Ové Japonais es un queso blando elaborado con leche entera y cruda de cabra, decorado con una hoja de cerezo japonés (Sakura), elaborado por Vincent y Marion Lerat en su granja La Mouchardière. Empresa familiar creada en 1980, la quesería Basilou está situada en Perche, en el pueblo de Saint-Julien-sur-Sarthe, que se encuentra en el departamento de Orne, de la región de Normandía.
Vincent Lerat, apoyado por su compañera Marion, se hizo cargo de la granja familiar y ahora cría 380 cabras alpinas, cuya leche se transforma íntegramente en la propia granja, en quesos de leche cruda como este Ove Japonés, el Basilou, el Bûchette Basilou, o el Trèfle du Perche.
La particularidad de la producción de la quesería Basilou es que no utilizan ningún fermento comercial, sino que los cultivan ellos mismos, lo que les permite controlar perfectamente su producción y su regularidad.
El Ové Japonais es un queso «fermier» (de granja) elaborado con leche cruda de cabra, de pasta blanda y corteza natural, que cubre al inicio de la maduración con una hoja de Sakura, un cerezo japonés.
Tiene forma ovalada y pesa unos 140 gramos.
Su corteza, muy fina y de color crema, está bellamente vermiculada y recubierta de una ligera pelusa blanca uniforme de moho. Sobre ella se coloca una hoja de cerezo japonés (Sakura). Esta última aporta un sabor sutil por descubrir…
Su pasta, muy blanca, presenta un centro calcáreo y una fina capa cremosa bajo la corteza.
En nariz, el Ové Japonais tiene un aroma caprino y láctico.
En boca, es un queso suave, cremoso, con un buen sabor a leche fresca, aromas vegetales y cereza roja al final.
Es un queso estacional que se fabrica sólo de marzo a octubre (el quesero respeta el ciclo natural de cría de las cabras).
Si todos los quesos es importante consumirlos a temperatura ambiente, en este es imprescindible, si quiere saborear toda su fragancia de matices. Una vez llevado a la temperatura adecuada, disfruté de este queso derretido sobre pan tostado con una mermelada de higos, o cualquier otra mermelada a base de frutas. Sera el foco de atención en cualquier tabla de quesos. Lo maridaremos con un vino de hielo de uvas Riesling procedente del valle del río Mosel en Alemania.

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