Paglietin alle Viole
El Paglietin alle Viole es un queso elaborado por el Caseificio La Bottera, una empresa familiar ubicada en Morozzo, provincia de Cuneo, en la región italiana del Piamonte. Fundada hace varias décadas, La Bottera se especializa en la producción de quesos artesanales, respetando métodos tradicionales que preservan las técnicas locales y la calidad de la leche. La empresa utiliza principalmente leche cruda de vaca, cabra y oveja, proveniente de sus propios rebaños o de productores locales cuidadosamente seleccionados. Su filosofía combina tradición y artesanía, garantizando que cada queso tenga un carácter único y una alta calidad organoléptica.
La Bottera se distingue por madurar sus quesos en bodegas subterráneas excavadas en roca porosa, donde la temperatura y la humedad constantes favorecen el desarrollo de texturas y aromas complejos. Entre su catálogo destaca el Paglietin alle Viole, una pequeña joya de queso estilo Robiola de tres leches, aromática y de sabor delicado, con notas florales sutiles. La corteza está cubierta de moho blanco y el interior es de color marfil; sobre la superficie se colocan flores de violeta secas, recogidas a mano, antes de iniciar la maduración artesanal en bodega. Tras unos días, la pasta se vuelve más cremosa en el centro, y su aroma láctico se combina con un sabor dulce, fragante y ligeramente intenso, en el que se perciben claramente las violetas.
Este queso es ideal para los amantes de los quesos blandos y delicados. Se recomienda degustarlo a temperatura ambiente para disfrutar plenamente de sus aromas y sabores. Su pequeño tamaño, forma redondeada y decoraciones florales lo convierten en una pieza central perfecta para tablas de quesos, aportando elegancia y color. Combina de manera excelente con frutas frescas como peras o uvas, frutos secos, miel ligera y panes artesanales, resaltando la complejidad de las leches y las notas florales sin opacarlas.
En cuanto a las bebidas, el Paglietin alle Viole marida muy bien con vinos blancos o rosados suaves, que complementan su delicadeza, o con vinos tintos jóvenes del Piamonte, como Dolcetto o Langhe Nebbiolo, que no dominan su sabor. Para quienes prefieren alternativas sin alcohol, té ligero o infusiones florales armonizan con las notas de violeta, ofreciendo una experiencia sensorial equilibrada y elegante, tanto en degustaciones individuales como en presentaciones en tabla.
